Los destinos clásicos para la luna de miel, como las Maldivas, Santorini y la Costa Amalfitana no tienen nada de malo. Solo que estás de luna de miel con al menos un centenar de otras parejas de recién casados. En estos 5 destinos seguro que tienes más intimidad.
Justo al noroeste de Seattle y frente a la costa de Canadá se encuentran las islas San Juan. Este archipiélago de ensueño es un paraíso para los amantes del aire libre, la gastronomía y el arte. Aquí no hay playas de arena blanca ni tropicales aguas azules, sino cascadas salvajes, húmedos bosques e innumerables orcas que puedes admirar de cerca en un kayak.
En la acogedora Friday Harbor, la «ciudad» más grande de las islas, encontrarás numerosas galerías de arte, librerías y agradables cafés. No se te ocurra irte de las islas sin una degustación de sidra en Westcott Bay, el lagar más antiguo del estado de Washington.
Las cabañas en los árboles siempre tienen algo mágico, pero esta en Sabi Sand Game Reserve en Sudáfrica supera todas tus expectativas. Muy por encima del suelo duermes en una tarima mágicamente iluminada. Sin paredes, puertas ni ventanas pero bajo un manto de estrellas. hMientras en la lejanía rugen los leones y las cebras caminan debajo de la cabaña, juntos disfrutáis de una cena en plan picnic. Aventurero y romántico.
Zermatt demuestra que una luna de miel no siempre tiene que consistir en palmeras, playas y cócteles. Este pueblo de montaña suizo se encuentra a los pies del famoso Matterhorn y en medio de una gigantesca zona de senderismo y esquí. En verano encontrarás aquí románticos prados alpinos y en invierno una capa de nieve convierte el paisaje en un auténtico cuento de hadas. También puedes esquiar aquí en verano. El Matterhorn Glacier Paradise es la zona de esquí de verano más alta de Europa.
¿Te gusta lo salvaje, insólito y aventurero? Entonces, la Montaña Mágica Lodge es el destino perfecto para tu luna de miel. Este hotel especial se encuentra en la reserva de la biosfera de la UNESCO, Huilo Huilo, en lo profundo de la selva chilena. El hotel está construido como una montaña que se mezcla completamente con la exuberante vegetación. Aquí duermes en un «volcán» y una cascada fluye desde el techo hasta tu ventana. Desde detrás de la cortina de agua puedes ver la jungla infinita.
Desde el hotel puedes practicar equitación, tirolina y senderismo. Pero, por supuesto, no necesitas hacer nada, porque la razón principal por la que vienes aquí es para una completa relajación.
Colmar es uno de los secretos mejor guardados de Francia. La ciudad está situada en la región de Alsacia, una región llena de viñedos. Aquí celebras tu boda todos los días con una nueva cata de vinos en una de las muchas vinotecas. Gracias a su situación en la frontera con Alemania, Colmar tiene una sorprendente cantidad de influencias alemanas que garantizan una especial mezcla arquitectónica. Una barca eléctrica plana te lleva por románticas vías fluviales a lo largo de coloridas casas.
